ASPECTOS FINANCIEROS DE LA CUESTION DE LOS FONDOS DE SANTA CRUZ

En la Reunión Cumbre de Jefes de Estado de Monterrey, México en Enero del 2004 el presidente Kirchner dijo públicamente, ante decenas de Jefes de Estado, que la provincia de Santa Cruz, de la que era entonces gobernador, había invertido los fondos provenientes de regalías giradas por la Nación durante la década del ´90 en la Reserva Federal de los Estados Unidos al 1 % anual.

Este dato fue comprobado falso: el Banco Central Norteamericano no emite bonos públicos y no opera con colocaciones de Estados Subnacionales.

Desde entonces a la fecha denuncia de Salbuchi mediante el Gobierno Kirchner se ha resistido a suministrar información clara y concreta sobre los usos, destinos, tipo de operaciones y derrotero seguido por estos fondos, en una actitud sospechosa que compromete seriamente sus antecedentes como funcionario público y también la transparencia de ciertos actos de su Gobierno, ya que se parte de dichos no verdaderos expresados como Presidente de la Nación y hechos sobre los que, además, existiría un bloqueo en la investigación de los mismos.

Los interrogantes frente a la falta de información sobre el manejo de los fondos de la Provincia de Santa Cruz y la necesidad de esclarecimiento de tales hechos motivan la inquietud lógica que el presidente Kirchner deba dar explicaciones claras y precisas sobre el manejo realizado por él de tales dineros públicos.

El objeto de este trabajo no es aportar ahora datos sustancialmente nuevos sobre la cuestión ya que las investigaciones están bloqueadas a nivel de Gobierno sino simplemente sistematizar el problema que ya ha sido identificado circunscribiéndonos en lo que hace a sus aspectos financieros y de control.

 

ORIGEN DE LOS FONDOS.

En Abril de 1993 la Administración Nacional (con Menem Presidente y Cavallo Ministro de Economía) depositó a favor de la Provincia de Santa Cruz (entonces gobernada por Kirchner) 654 MD (*) por concepto de regalías de petróleo y gas natural que habían sido mal liquidadas a las provincias hidrocarburíferas desde la década del ´80.

Este problema se arrastraba desde 1980 y había dado lugar a una presentación judicial que, después de largos años de pleito, se resolvió a favor de las provincias reclamantes: Chubut, La Pampa , Neuquen, Salta y Santa Cruz.  El total de estas regalías acumuladas, abonadas por el Estado Nacional, habría llegado a unos 3.000 MD.

Al gobierno provincial Kirchner le fueron acreditados 654 MD dentro de este total pero, con el descuento de algunas deudas existentes con la Nación y otros conceptos, habría recibido neto 535 MD.  La Nación le pagó a la Provincia de la siguiente forma: el 40 % (40.1) en efectivo (unos 214 MD) y el 60 % (59.9) en Títulos y Acciones de YPF (unos 321 MD).  Con esta masa de dinero, el gobierno Kirchner adquirió así acciones de YPF entonces privatizada por unos 290 MD; títulos que fueron tasados a 19 dólares por acción.  Según datos recientes de la Provincia de Santa Cruz la cantidad de acciones adquiridas fueron unas 13.5 millones, lo que ponderado por el valor unitario citado de 19 US$/acción - daría un importe algo menor, de 256.5 MD.

Seis años después, en 1999, estas acciones fueron vendidas por Kirchner a más del doble de su valor de compra a 44.78 $ por acción percibiendo la Provincia , según se dice, unos 660 MD (aunque la cuenta nos daría aquí 605 MD).   La Provincia habría quedado así, en principio, con una masa de dinero del orden de los 1.000 MD: 535 M del giro inicial dentro del cual estaba el valor de compra de las acciones de YPF más los 660 MD (ó 605) de la venta posterior de dichas acciones (aunque descontándole el valor inicial).

El ex ministro Cavallo declaró que en algún momento - dentro de ese período de 6 años (entre la compra y la venta de las acciones) la provincia llegó así a tener más de 1.000 MD (habló de 1.084).  Porque hay que tener presente que el resto de los fondos, en el entretiempo, también tuvo alguna forma de colocación financiera alternativa.  Pero la cifra exacta para estas cuentas se desconoce y no pueden hacerse conjeturas en firme mientras se carezca de datos oficiales comprobados y consistentes.

Lo único cierto es que la Provincia recibió originariamente una suma mucho mayor a la que ahora declara de 521 MD sobre todo contando con las operaciones que se hicieron a posteriori (esencialmente, el adicional de ganancia por la venta de las acciones de YPF).   Santa Cruz resultó así beneficiada en forma extraordinaria durante la gestión Kirchner, fundamentalmente por estos fondos acumulados de regalías, que le reportaron al inicio los 535 MD antes citados.  Según observa el senador Osvaldo Terragno, esta suma fue obtenida en realidad por Santa Cruz a cambio del apoyo de Kirchner a la Privatización de YPF, ya que existía un Acta firmada entre la Nación y la Provincia de fecha 30.8.91 - por la cual la administración Menem le reconocía deudas por 480 MD en concepto de las regalías, pero ello quedaba sujeto a la aprobación legislativa de la Ley de Privatización de YPF; de modo que si Kirchner aceptaba apoyar la Ley se beneficiaba con el giro de los 480 MD (que luego fueron 535).

La Ley 24.145, de Noviembre de 1992, estableció de este modo la provincialización de los yacimientos y la venta de YPF gracias entre otros factores al apoyo dado a esta privatización por las provincias con explotación y reserva de hidrocarburos (entre ellas, Santa Cruz).

 

EXPATRIACIÓN DE LOS FONDOS.

Hasta aquí hemos visto algo del origen de los fondos de Santa Cruz y su acrecentamiento relevante a través de la ganancia obtenida por la venta de las acciones de YPF en su poder; pero el derrotero y colocación de estos fondos no está claro ni tampoco el destino del resto de la suma inicial que fue la otra mitad de los 535 MD recibidos, es decir, la parte de los importes no aplicados a las acciones de YPF ni, mucho menos, las colocaciones externas hechas antes y sobre todo después de embolsado el monto de dicha venta de acciones.

Se dice y esto no ha sido desmentido por ninguno de los actores que los entonces Ministro Cavallo y Secretario de Finanzas Daniel Marx asesoraron al gobernador Kirchner sobre la colocación de los fondos de la Provincia en el Exterior.   Pero no se sabe a dónde fueron a parar estos fondos públicos ni el recorrido financiero que tuvieron.  Inicialmente, habrían sido girados a Bancos de Estados Unidos y Suiza, de donde a su vez se habrían derivado a otras plazas intermedias, hasta llegar a Suiza.  De hecho, las operaciones de salida de capitales por parte de la Provincia se habrían hecho por la Sucursal Buenos Aires del Banco de Santa Cruz antes y después de su privatización así como el pago por servicios prestados por firmas del exterior.

Por ejemplo, tomando el período Agosto-Octubre de 1995, se podrían constatar una serie de pagos al exterior hechos a Dean Witter Reynolds Inc, de Nueva York, en más de una decena de casos y por importes que oscilan entre 2, 3 y 5 MD cada uno.  De la misma manera, con fecha 21.3.95 se constata el pago de una garantía  a KEGA Holding International Inc, por 17.2 MD.  La mayoría de estas operaciones siempre para el breve período de muestra citado parece eran hechas comprando dólares al Banco Nación (BNA) y efectuando las transferencias a la o las cuentas de la Provincia en el Citibank de Nueva York (entre 14 y 15 MD en Marzo del ´95).  También habría transacciones hechas a través del Banco brasileño Pan de Azúcar - luego quebrado en forma fraudulenta y otras entidades.

En todos estos casos tomados por muestreo y que, como tales, pudieran no ser los más relevantes intervenían el Gerente Departamental J. Domenech y el Gerente adscripto a la Intervención Lázaro Báez (que se entiende actuaba entonces como Gerente General del Banco de Santa Cruz).  Pero, como es obvio, la reconstrucción fragmentaria de estos datos desde afuera es tarea imposible si no se tiene acceso a la información y el gobierno de la Provincia no la facilita.  Y esta cuestión es de máxima y vital importancia para conocer las grandes operaciones de colocación de fondos, donde se trataba no ya de transacciones chicas (de 2 a 5 MD) sino de centenares de millones de dólares.

No hay vuelta que darle: si tales masas de dinero fueron giradas al exterior, las mismas tienen que estar exactamente detalladas en algún lado en sus montos, colocaciones, rentabilidades, transferencias, etc., cosas de las cuales hasta ahora no se tiene información, pese a los reclamos de la oposición política santacruceña (que no han sido atendidos por la Justicia ni por la Legislatura Local ) y, en particular, frente a la denuncia de Salbuchi en el fuero federal, que contribuyó en forma determinante a alertar sobre este problema a la Opinión Pública.

Es sabido que una de las irregularidades clásicas o típicas en los casos de fraude o cohecho contra el Estado se efectúa multiplicando innecesariamente las operaciones de transferencias bancarias (de un banco a otro, de una filial a otra, de una cuenta a otra, y así sucesivamente). Como estas operaciones generan comisiones y gastos que son facturados o descontados por los Bancos al titular (el Estado Nacional o Provincial, o un Organismo Público cualquiera) luego es de estas comisiones o del valor de las mismas - de donde se derivan retornos, coimas o sobornos a los funcionarios intervinientes  por parte de las entidades financieras favorecidas.   Y está, por ende, dentro de las posibilidades lógicas que el ocultamiento de las operaciones con los fondos de Santa Cruz se explique justamente por la eventual multiplicación de este tipo de movimientos.

Ésta y muchas variantes por el estilo pueden explicar irregularidades producidas, identificando a los funcionarios intervinientes y, sobre todo, poniendo en claro el grado de rentabilidad de las operaciones realizadas; para poder llegar así finalmente a la cuenta total de los fondos que hoy están sustraídos a toda investigación.    Por eso es tan importante, a los fines de control y deslinde de responsabilidades dentro de los niveles de Gobierno, poder identificar las operaciones y el derrotero de las fondos, que son dineros públicos.  Porque no basta mostrar ciertos importes o cortes parciales de información a determinada fecha sino tener la continuidad o concatenación de las operaciones, así como la rentabilidad producida por ellas en todos los casos de Inversiones Financieras.

 

LA SITUACION ACTUAL.

De hecho, conforme los datos parciales dados a conocer por el Gobierno de la Provincia - recién este año - se reconoce en la actualidad la existencia de un stock de fondos colocados en el Exterior de 521 MD.   Nótese como es obvio que se estaría blanqueando hoy una suma que sería aproximadamente la mitad de los fondos totales en juego.   La diferencia faltante se dice, unos 562 MD - según la actual administración Acevedo habría sido utilizada en sucesivos ejercicios fiscales desde el año 1993 hasta la fecha; pero no se conocen detalles, constancias de gasto ni destino preciso de tales partidas de aplicación.  La única declaración oficial concreta sobre los Activos Financieros en el Exterior de la Provincia de Santa Cruz es que al 30.6.05 estarían depositados 521.2 MD en una cuenta la número 0835-860194-3 del Credit Suisse Private Banking, en Ginebra, Suiza.

Obsérvese que el área de Banca Privada (como ha sido constatado por Salbuchi) corresponde a operaciones del Sector Privado y efectuadas por Personas Físicas, no Sector Público a cargo de Funcionarios; de lo cual emerge la presunción que transacciones sobre dicha cuenta se hayan realizado por parte individuos, como si se tratase de operaciones privadas.  De los 521.2. MD ahora declarados en el Informe que acompaña el Decreto 2.052/05 del gobernador Acevedo, 38.5 MD corresponden al préstamo dado recientemente a Petroquímica Comodoro Rivadavia y 482.7 MD a la masa disponible para repatriación de la Provincia.

A su vez, las autoridades declaran que la composición de estos fondos es actualmente la siguiente: 323.1 MD en Inversiones a Corto Plazo (menos de un año), 159.5 MD en Bonos e Inversiones similares, 38.5 MD del Fideicomiso por el préstamo citado y 152.200 dólares en efectivo.   Estos importes como hemos dicho - se declaran hoy depositados en el Banco Credit Suisse, en Ginebra, Suiza (el mismo banco que bajo la casa neuyorkina CSFB-Credit Suisse First Boston, dirigido por David Mulford, participó en el ruinoso Megacanje De la Rúa-Cavallo de Junio del 2001),  pero se sabe que antes lo estuvieron en el Morgan Stanley y en la filial Luxemburgo del Credit Suisse.  

Cabe reiterar que los datos de los fondos de la Provincia aparecen sintomáticamente registrados en el Área de Banca Privada, lo cual abre el interrogante adicional de que tales sumas de dinero se hayan manejado fuera de los canales oficiales y los funcionarios autorizados correspondientes.   Y ello es probable dada la naturaleza de las operaciones especulativas que habrían sido realizadas.   Según información dada a conocer por la Provincia este año, en el 2003 los fondos de Santa Cruz estaban colocados en Títulos y Acciones, en un Fondo de Inversión de Morgan Stanley (subsidiaria de la Banca Morgan , aunque bajo la fórmula legal de independencia jurídica) y en una cuenta del UBS AG (ex Unión e Bancos Suizos), después transferidos a Ginebra.  Ambas jurisdicciones Luxemburgo y Suiza se caracterizan, como es sabido, por su estricto secreto bancario.

El juez federal Jorge Urso, cuando estuvo interinamente a cargo de la causa por la investigación de los fondos de Santa Cruz a raíz de la denuncia de Salbuchi libró exhortos a la justicia suiza pidiendo información sobre estas operaciones pero luego el juez titular Guillermo Montenegro (nombrado por el presidente Kirchner) los habría dejado sin efecto.   El Dr. Montenegro como fuera informado oportunamente se declaró incompetente en el caso y giró las actuaciones a la Provincia de Santa Cruz, donde el juez penal local Santiago Lozada o Losada (que pudiera tener conflicto de intereses debido a su relación con la familia Kirchner) procedió al archivo del expediente, sin que hasta hoy se pueda tener acceso al fallo.   Hasta aquí, lo poco que se sabe acerca del derrotero legal-administrativo y financiero-bancario de los fondos de Santa Cruz.

De todo lo dicho, surge entonces que los 521 MD que aparecen ahora declarados son prácticamente la mitad del total percibido por la Provincia y manejado en forma secreta durante 10 años: entre 1993 y el 2003; o durante 12 años, si se cuenta hasta la actualidad.   El problema es que se trata de conocer cuál fue el recorrido de estos fondos, qué operaciones se realizaron con los mismos, qué rentabilidad dieron y quiénes fueron los funcionarios intervinientes. Y cómo se llega, entonces, al destino y/o colocación actual de estos dineros públicos.

No se trata sólo como parecen entenderlo erróneamente algunos sectores del Gobierno y ciertos políticos en sus denuncias declaradas ante la Opinión Pública (no ante los Tribunales) de pedir la repatriación de los fondos de Santa Cruz, que son los remanentes, sino de conocer el derrotero total de los mismos.   No estamos hablando solamente de los 500 MD que hoy aparecen sino de los más de 1.000 MD manejados por el gobierno de la Provincia durante más de un decenio.   Hoy se sabe, por las informaciones parciales suministradas por el Gobierno de Río Gallegos, que existe un saldo de 521 MD.

De este importe, hay que poner aparte 38.5 MD otorgados en préstamo por el actual gobierno de la Provincia a la empresa Petroquímica Comodoro Rivadavia para la construcción de una nueva planta de cemento portland en Pico Truncado; con lo cual quedarían disponibles 482.5 MD.  El gobernador Acevedo anunció en Junio pasado la voluntad de la Provincia de repatriar o traer a la Argentina dichos fondos pero como hemos dicho, estrictamente hablando el problema no radica es comprometer tal retorno de fondos ya que ello es privativo de la Provincia (si es que lo decide a través de los canales institucionales pertinentes) sino informar sobre el derrotero seguido por la totalidad de éstos, para poder determinar entonces si las cuentas cierran entre lo transferido al Exterior más las rentas obtenidas de las colocaciones externas menos los montos que hayan sido reingresados al país o se encuentren ahora disponiobles.    Y éste es el tema clave sobre el cual el Gobierno Kirchner y el de la Provincia de Santa Cruz evidencian que no quieren suministrar información clara y concreta.

LA CARTA SECRETA DE KIRCHNER.

Frente a este panorama, y dada la imposibilidad de acceso a la información financiera fiscal (los fondos de la Provincia de Santa Cruz) y a las sentencias judiciales que no toman estado público (como, en este caso específico, el archivo de la causa por parte del Juez Lozada, de Santa Cruz) se abre el interrogante complementario de cuál es el motivo o razón que explica semejante grado de impunidad pública cuando, desde todos los ángulos (incluso el gubernamental) sentimos a diario justamente  el discurso de la lucha contra la Corrupción.    Ocurre que aquí el Presidente no aclara el pasado de su administración provincial en un tema tan sensible como es el manejo de los fondos públicos y no permite esclarecer los hechos vinculados al tema, que podrían tener una obvia repercusión política. Y ello, pese a la proximidad de algo que él mismo calificó de  plebiscito de su gestión a través del test electoral de Octubre.

Surge entonces, paralelamente a la duda central sobre la forma de manejo de los fondos de Santa Cruz, la lógica pregunta adicional sobre por qué no se puede ir adelante con las investigaciones del caso bajo un régimen teóricamente democrático-republicano y sus instituciones.  Porque frente a este caso importante y concreto denunciado sobre potencial corrupción en el manejo de los fondos públicos resulta que, en la práctica, nadie interviene en los hechos - por lo menos hasta la fecha y salvo pocas excepciones salvo por medio de declaraciones.

El Juez Federal Montenegro (reiteramos, designado por el Dr. Kirchner) deriva la causa a la Provincia de Santa Cruz, pese a que el problema está planteado a raíz de los dichos falsos del Presidente, que fueron expresados en su condición de tal en una reunión internacional; y no solamente por el esclarecimiento de su gestión en materia de fondos públicos provinciales. El Juez Lozada o Losada, de Santa Cruz sobre quien pesa una fundada duda por conflicto de intereses debido a la vinculación sentimental que se le atribuye con una sobrina del presidente; y también a ciertos antecedentes de parcialidad que habría tenido anteriormente en su gestión resulta que archiva la causa derivada por el fuero federal sin que se pueda tener acceso al contenido del fallo.

El Defensor del Pueblo de la Nación se excusa de intervenir, respaldado en el hecho que existe una causa judicial por el medio; pero no se expide acerca del problema de la falta de acceso a las sentencias judiciales.  La Oficina Anticorrupción encargada precisamente, entre otras cosas, de analizar los antecedentes de los funcionarios públicos demora su participación por razones administrativas en un tema que toca directamente nada menos que al Jefe del Estado.

La Justicia a través de los organismos superiores de supervisión de orden Federal y Provincial todavía no se plantea o expide frente al problema de fallos cuestionables o secretos.  Las Organizaciones no Gubernamentales, muchas de las cuales se muestran activas para estudios y análisis genéricos, se abstienen en cambio de meterse en un tema flagrante de falta de acceso a la información y potencial corrupción   (como el caso concreto de Poder Ciudadano, representante en la Argentina de Transparency International).  De la misma manera, y pese a que algunos grandes medios de prensa le han dado cabida muy concreta a la cuestión, el tema no ha podido instalarse aún en la Opinión Pública.

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) tampoco se mezcla en el asunto pese a que, a través de la Superintendencia de Bancos y dado el carácter nacional de las transferencias al y desde el exterior, posee la Base de Datos y el acceso a todas las informaciones bancarias en que desee entrar, incluyendo lógicamente las transacciones realizadas a través del Banco de Santa Cruz (antes y después de su privatización a favor del grupo Eskenazi).  Y, por último, está el Congreso, donde se supone que convergen las inquietudes de los distintos partidos políticos en materia de información y transparencia, frente a los dichos falsos de un Presidente que tocan a un aspecto tan delicado de sus antecedentes de gestión; un ámbito legislativo dónde, salvo mínimas excepciones, el asunto no se ha perfilado siquiera como tema de debate.

Qué es, entonces, lo que explica esta aparente conspiración del silencio relativa? Y decimos relativa porque se hacen menciones o declaraciones circunstanciales o genéricas, pero muy pocos entran de lleno en el problema y asumen la responsabilidad de denunciantes, como sí lo hicieron en cambio - Salbuchi y Romero, con el patrocinio de los Dres. Labaké e Iglesias.  Cuál es la carta secreta que puede tener el Gobierno Kirchner para frenar, al menos hasta ahora, esta pesada sospecha fundada en su contra?  En lo personal, creemos que la respuesta a este interrogante es simple: la extorsión frente a las irregularidades o los delitos efectivos o potenciales de los demás; los de toda la Clase Política.

Porque la amenaza - ya sugerida por el presidente - pudiera estar en develar que todas o casi todas las provincias hidrocarburíferas habrían hecho poco más o menos lo mismo que Santa Cruz; que todas las administraciones provinciales habrían manejado con la misma discrecionalidad, falta de transparencia y control sus fondos públicos (como está demostrado en el manejo de los gastos públicos, los déficits fiscales, y sobre todo, en la impunidad de las Deudas Provinciales, que son tanto o más ilegítimas que la de la Nación pero ahora han sido federalizadas); que todos los bancos provinciales (muchos de ellos fuertemente comprometidos en irregularidades investigadas) habrían manejado de la misma forma sus operaciones como agentes financieros de las provincias; etcétera.

En definitiva, que la explicación de esta no intervención de la Clase Política , tanto en este caso de los fondos de Santa Cruz como en el de otros temas graves de las Finanzas del Estado en general, estaría siempre ligada directa y estrechamente al temor de una contraofensiva gubernamental sobre las gestiones de administraciones nacionales precedentes y administraciones provinciales que hayan incurrido en el mismo esquema de manejo discrecional y no transparente de los fondos públicos.

Y ello es lo que ataría, en el fondo, las manos de la Partidocracia a la impunidad de los gobiernos de turno, porque así se cumple la regla básica de la CORRUPCIÓN : TODO ES NEGOCIABLE.

(*) NOTA: MD significa siempre Millones de Dólares que, en la época de la Convertibilidad , se tomaban a paridad 1:1 con el Peso, de modo que aquí se consideran indistintamente las sumas de ese período como equivalentes entre las dos monedas ($=US$).

Héctor Giuliano - El Traductor Radial