NOVENTA
AÑOS DE LA NEFASTA DECLARACIÓN DE BALFOUR
por
La Estrella Palestina
Masas de nuestro pueblo palestino ...
Masas de nuestra Nación Árabe …
Hombres Libres de todo el Mundo y fuerzas del Progreso y de la
Democracia …
Noventa años pasaron desde la Declaración de Balfour. El
Canciller británico, en su documento dirigido a Lord Rothschild –
del Movimiento Sionista-, basa los términos de la misma, sobre la
conversión de Palestina en "un hogar nacional para los judíos",
bajo el amparo y el auspicio del imperialismo británico, que
pretende solucionar al "estilo europeo" la cuestión judía.
Un compromiso de Gran Bretaña, con los objetivos del movimiento
sionista, de establecer en el Medio Oriente una avanzada del
imperialismo, donde la "promesa" se acompañó con un plan
de división del mundo árabe y su repartición (Sykes – Picot)
para mantenerlo sumido en el subdesarrollo y asegurar la hegemonía
imperialista y el saqueo de sus riquezas.
Gracias a la persistente lucha del pueblo palestino, se fueron
desmoronando, a lo largo de noventa años y ante la opinión pública
mundial, los beneficios y los argumentos del discurso colonizador
sionista en Palestina. Se echó por tierra la leyenda del irracional
odio representado en la creencia de "Una tierra sin pueblo para
un pueblo sin tierra" y el mito basado en la fundación (en
1948), que obvió, el serial de horribles matanzas y depuración
racial de los auténticos dueños de la tierra, los palestinos. Se
desarticuló por completo la leyenda del "desierto" al que
acudieron los colonos y lo convirtieron en "tierras fértiles",
semejante a la leyenda colonialista que fue utilizada al invadir el
oeste americano. "La tierra virgen" hay que ocuparla y
defenderla de sus "primitivos" habitantes indígenas,
demagogia racial de la peor estirpe.
Desde su creación, la entidad sionista y su estrecha vinculación
con el movimiento capitalista mundial, constituyó la base y fuente
de las crisis del Medio Oriente. Ante el traslado del centro del
movimiento capitalista desde Gran Bretaña a Estados Unidos, quien a
su vez se convirtió en una potencia, luego de la segunda guerra
mundial, el movimiento sionista, le trasladó su lealtad y se
convirtió en una parte orgánica de sus planes y estrategias, además
de constituir en su corta y emergente historia, la causa principal
de masacres, agresiones, guerras, depuración racial, extremismo,
racismo y ostracismo, haciendo de la mentira una oficial política
de estado.
Masas de nuestro pueblo palestino... Masas de nuestra Nación Árabe
... Hombres Libres de todo el Mundo
Tras el desastre nacional palestino en 1948 y el establecimiento
de la entidad sionista, comenzó una nueva historia de guerras y
masacres, a partir de la agresión tripartita (Israel - Gran Bretaña
– Francia), contra Egipto, en lo que se llamó ¨la campaña de
Suez¨ en 1956, que pretendía reinstaurar el control colonialista
sobre Egipto y el Canal de Suez, derrotar al líder nacionalista
Gamal Abdel-Nasser y al Movimiento Nacionalista Árabe, que se
encontraba en pleno auge y continuó hasta llegar a la guerra y
agresión de junio 1967, con una ofensiva relámpago por parte del
ocupante que se apoderó del resto de la histórica tierra de
Palestina, además de otras tierras árabes como los Altos del Golán,
en Siria y la península del Sinaí, en Egipto.
La incapacidad de la ONU de poner en práctica las numerosas
resoluciones adoptadas, debido al Veto norteamericano con su
absoluto respaldo a la entidad sionista, condujo a una profunda
crisis moral y política titulada la política de Doble rasero. Esta
política se ve reflejada en la negación de Israel ante la devolución
de los territorios ocupados en la agresión de 1967, el retorno de
los refugiados palestinos a sus hogares en virtud de la Resolución
Internacional 194 y en la constante ejecución de horrendos crímenes
en contra del pueblo palestino que defiende su tierra y patria.
La guerra de octubre de 1973 representó una respuesta a la
agresividad y el expansionismo israelí, no obstante, la desviación
de los objetivos trazados por Sadat, abortó sus resultados en el
terreno militar y nuevamente allanó el camino ante el bandolerismo
israelí materializado en las guerras, matanzas y agresiones contra
el Líbano (1982 – 2006) y las continuas guerras contra los hijos
del pueblo palestino.
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Hombres Libres de todo el Mundo
Los Acuerdos de Oslo de 1993 derivaron en mayor división para la
causa nacional palestina, así como mayor división de los
territorios ocupados en 1967 convirtiendo los mismos en Guetos
-Bantustanes, reflejados en las realidades colonialistas israelíes
sobre el terreno, lo que obstaculiza la creación de un estado
palestino soberano, cuyas fronteras están reconocidas por la
legalidad internacional y las Resoluciones de la ONU.
Las condiciones de la colonización en Cisjordania y Jerusalén
Este y su cinturón geográfico, tras el retorno de la sangrienta y
directa ocupación militar a las zonas clasificadas como ¨ A ¨ y
¨ B ¨ en abril 2002; reafirman que los citados Acuerdos, según
los propios alegatos sionistas, no significaron ¨Una arremetida
hacia la Paz¨, sino más bien una maniobra, sobre el terreno
palestino, que se dio a conocer como ¨Hechos Consumados¨, reflejo
de la propia visión colonialista hacia las raíces y la historia
del conflicto en Palestina.
El venidero encuentro de Annapolis hace pensar en los intentos de
retornar a las negociaciones desde el punto cero, volver al punto de
partida al rechazar Washington los programas de tiempo para las
negociaciones, al mostrar Israel mayor intransigencia y al convertir
las masacres en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este en un rasgo
habitual de la vida cotidiana, mediante las operaciones bélicas de
penetraciones, bombardeo aéreo, asesinatos, liquidaciones físicas,
cercos, genocidio, asfixia económica y diferentes formas de
embargo, con el objetivo de desarticular los vínculos patrióticos
del tejido nacional social palestino.
Reiteramos la importancia de una seria preparación ante las
puertas del encuentro de Annapolis, mediante la redacción del
borrador de un Documento que incluya determinados programas de
tiempo para el inicio y el fin de las negociaciones, acordes a la
visión de un arreglo, basado en la legalidad Internacional, que
garantice al pueblo palestino sus legítimos derechos, en lugar de
negociaciones estériles, que nos lleven nuevamente al laberinto de
las insuficientes soluciones parciales.
Todo proceso negociador debe ser antecedido por el cese de la
colonización, invasiones, liquidaciones físicas, políticas de
asfixia, por la liberación de presos, la eliminación de las
barreras y barricadas y de los obstáculos sobre los derechos
humanos básicos y sencillos.
Lo que se requiere es arribar a un arreglo global, abarcador y
equilibrado, con el establecimiento de un estado palestino
independiente sobre todos los territorios ocupados en 1967 con su
capital Jerusalén, con el derecho de los refugiados a retornar a
sus hogares y propiedades según la Resolución Internacional 194 y
convertir el encuentro en una Conferencia Internacional para tratar
las cuestiones del conflicto árabe–israelí, sobre la
interpretación de ¨ La Iniciativa Árabe de Paz ¨.
En el noventa aniversario de la nefasta declaración de Balfour
afirmamos una vez más que garantizar los componentes de la firmeza
y resistencia nacional, requiere en primer lugar, recuperar la
unidad nacional palestina, poner fin al estado de división, llevar
a la practica el Documento de la Reconciliación Nacional Palestina
para reconstruir la OLP y formar un gobierno de unidad nacional
Palestino.
Frente Democrático para la Liberación de Palestina
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