DE BOCA EN BOCA: EL SECRETO DE LOS "MISTERIOSOS CANALES DE COMUNICACIÓN POPULAR"

Editorial de la revista G.A.I.A.

enviado por Carta Argentina

Dicen que la Revolución Francesa, como la Rusa, se iniciaron en las colas del pueblo que esperaba para hacerse del escaso pan. De pronto la “procesión que venía marchando por dentro” estalla en un solo grito de dignidad. A esa procesión subterránea el último gran líder político argentino, el General Juan Perón la llamó “los misteriosos canales de comunicación popular”.

¿Qué es esa comunicación? Es aquello que circula cotidianamente en nuestros diálogos con los demás y que va construyendo opinión e interpretación de la realidad más allá de lo que se conoce públicamente a través de los medios de comunicación. Más allá de la llamada “opinión pública”, local y globalizada. Es la “opinión del pueblo” que no tiene publicidad pero es real, está allí y cuesta mucho desentrañarla. La ciencia lo ha intentado. Los más variados estudios sociológicos, de mercado, de audiencia, intentan permanentemente desentrañar los mensajes de esa comunicación. Lo han logrado en aspectos muy puntuales pero aún no lo han podido hacer para anticipar hechos que conmueven la historia. Y mucho menos en la Argentina, que tiene el pueblo más impredecible del mundo.

Aunque es casi imposible saber qué circula por esos misteriosos canales, sí sabemos cómo circula. De boca en boca. Podrá aparecer cualquier cosa en los medios de comunicación, pero cuando en la Argentina se impone una definición histórica, el hecho emerge a través de los vínculos familiares, de amistad o sociales. Se forma una ola de uno a uno hasta que rompe en el destino. En ese momento, a los medios sólo les queda ir atrás de los sucesos o influir sobre las personas más aisladas. Pero es muy poco lo que se puede hacer cuando la comunidad emerge nuevamente en la evolución. Y emerge de boca en boca.

Cuando una tarde, nos quemábamos la cabeza por encontrar un nombre a nuestro programa de radio, no fue casual que Nicolás, un joven recientemente incorporado a G.A.I.A., habiendo comprendido lo que nosotros buscamos, encontró este simbólico nombre para nuestra nueva apuesta en el trabajo con todos ustedes. Cuando dijo –De boca en boca-, el acuerdo fue unánime.

Y así comenzó una nueva emisión de nuestro trabajo en radio. Con esta consigna que venimos llevándola a la práctica desde hace más de cinco años y que nos ha permitido llegar hacia nosotros mismos y a los demás. Y eso es lo que promovemos, sin negar, todo lo contrario, los avances tecnológicos, que el “de boca en boca” sea más vigente que nunca.

Sumergidos en los “misteriosos canales de comunicación popular”, esperamos que cuando haya un grito de indignación en las “colas de pan” del Siglo XXI, podamos saber escucharlo, para ser mensajeros y protagonistas de una nueva semana que conmueva al mundo.