ENTREVISTA
A MOHAMED HASSAN: ¿CÓMO
EXPLICAR EL ÉXITO DE HAMAS?
Mohamed Hassan. El Hamas nace de uno de los más viejos movimientos políticos
de Egipto, los Hermanos Musulmanes. La palabra “Hamas” significa el
despertar, y hace referencia a algo que está en erupción... Es un
movimiento nacionalista islamista que se podría comparar al grupo
nacionalista irlandés que hizo frente a la ocupación colonialista británica,
y que se desplegó a partir de 1916 como movimiento de resistencia, el
Irish Republican Army. Como los irlandeses eran católicos y los colonos
británicos protestantes, el inquilino intentó hacer una guerra de religión.
La religión puede utilizarse para movilizar a un pueblo por una causa. Para comprenderlo, debemos tener en cuenta distintos
acontecimientos históricos. El primero, es la guerra de los Seis Días
que desacreditó el nasserismo en 1967. Nasser, era un Presidente egipcio
que fomentó una revolución árabe por la independencia y el desarrollo,
pero a raíz de la severa derrota que le ocasionó Israel, su ideología
perdió influencia. Tras su muerte, Egipto e Israel entraron de nuevo en
conflicto en la guerra de Octubre, en 1973. Egipto y Siria querían
recuperar territorios bajo la ocupación israelí. Finalmente, Egipto e
Israel firmaron un acuerdo, pero este acontecimiento marcó una profunda
división en el mundo árabe entre los países que estaban dispuestos a
aceptar las condiciones israelíes y los que querían resistir como Siria,
Argelia, Irak... por supuesto, la cuestión palestina continuaba siendo un
elemento crucial en estos conflictos. La resistencia a Israel por otra
parte había conducido a la formación de la OLP, la Organización para la
Liberación de Palestina, esta organización fue creada a fin de reunir
los distintos movimientos rebeldes para combinar sus esfuerzos. Antes de
negociar con esta organización -en los llamados Acuerdos de Oslo-, Israel
la consideraba como un grupo terrorista y le infligió varias derrotas que
pueden explicar la aparición del Hamas. Con el Intifada, la OLP se dividió en dos alas: la más
fuerte -cuya base se encontraba en Túnez- era la que quería continuar
con la resistencia; y otra -menos importante- la que quería negociar un
acuerdo. Los miembros de esta facción se ocultaban y no tuvieron el valor
de defender sus opiniones hasta los Acuerdos de Oslo, donde se
manifestaron oficialmente, y se volvieron más fuertes. Arafat era uno de
los estrategas de esta última, quien después del final de la primera
Intifada, utilizó las distintas corrientes palestinas con el fin de
llevar la OLP a territorio palestino. En primer lugar, estaban los que deseaban seguir el
combate contra Israel sin concesión a los que Arafat debía marginalizar
para obtener algo. Luego, estaban los que querían capitulares, y que son
quienes dirigen al Gobierno palestino hoy; y –finalmente- la burguesía,
que deseaba obtener beneficio de una negociación, a estos Arafat los
utilizó para obtener lo que quería. Ese proceso nos conduce a los
Acuerdos de Oslo en 1993, que permitieron a la OLP volver de nuevo a
Palestina pero aparte de eso, el resto fue una gran derrota. Los
palestinos aceptaron un 22% de sus tierras. ¡No hay ningún acuerdo en la
historia que confiera a una parte sólo el 22% de lo que pide! La OLP deja
de ser considerada como una organización terrorista y gana el
reconocimiento de Israel, pero no consigue mejorar realmente la situación
en Gaza y Cisjordania. No se mencionó nada en el acuerdo para poner fin a
la colonización israelí, este elemento desacreditó a la autoridad
palestina ante la población y también contribuyó al éxito del Hamas
como movimiento de resistencia. Otro componente importante, es el hecho de
que la autoridad palestina, que recibía fondos del Occidente, se convirtió
en una organización corrupta. Nada indica que el Hamas tenga este
problema. Por una parte, sus principales fuentes de ingresos proceden de
un sistema basado en la caridad del mundo musulmán, y dado que criticaron
duramente a la autoridad palestina sobre el problema de la corrupción,
velan seriamente para que eso no se produzca en sus filas. Tres factores explican el éxito del Hamas. El primero, es
el mantenimiento de la resistencia y la denegación de toda solución
impuesta, lo que corresponde a la voluntad de la población. Bajo la ocupación de Gaza y de los otros territorios, no
era posible para los palestinos discutir abiertamente o incluso imaginar
su futuro excepto en dos lugares: la mezquita y la universidad. El Hamas
era ya activo por supuesto en el primero, pero enseguida comenzó, como
cualquier otro partido político, a manifestarse en las organizaciones
estudiantiles. ¡El mercado se abre para todos los partidos! El Hamas
reclutó, entonces a jóvenes estudiantes brillantes, que se destacaban en
la sociedad debido a su dedicación y su honradez. Era fácil para el
Hamas convencerlos, ya que la voluntad de resistir los unía. ¡No hay
misterio! El Hamas expresa abiertamente lo que la población siente en su
corazón. Con los elementos más combativos, los más inteligentes y los más
educados de la sociedad, el Hamas pasó a ser una gran organización. Estaban afectadas por la corrupción y los escándalos,
incluso varios periodistas palestinos las condenaron por eso. Arafat era
una especie de árbitro entre las distintas facciones, pero después de su
muerte, las contradicciones entre el Hamas y el Fatah se volvieron antagónicas.
Israel explotó estas disensiones y comenzó a utilizar a Fatah para
popularizar al Hamas, pensando que éste no aceptaría participar en las
elecciones. Esta es la razón por la que proyectaron rápidamente poner en
pie un escrutinio. Todo el mundo se sorprendió que el Hamas aceptara
participar, pero nadie estuvo realmente impaciente. Pensaban en efecto que
el movimiento, al presentar una manera de pensar dogmática y muy
limitada, sería superado por el partido mayoritario. Contra toda proyección,
el Hamas creó una coalición y ofreció una imagen flexible, muy lejos de
lo que se habría podido esperar de una organización fundamentalista. En
realidad, el Hamas deseaba un Estado islamista pero la realidad es
diferente. Un régimen islamista es el objetivo último del programa
del Hamas, pero se debe precisar que no podrá nunca aplicarlo. En efecto,
in situ, la organización está basada en un movimiento patriótico, es
necesario saber que la guerra brutal llevada por Israel contra Gaza no sólo
movilizó las fuerzas del Hamas, sino todas las fuerzas patrióticas,
incluidas las de Fatah. Esta agresión unificó al pueblo palestino. Sí, debido a la agresión israelí. La idea que el Hamas
pueda crear una sociedad basada en métodos de producciones islamistas es
una ilusión. Es simplemente imposible, por múltiples aspectos, esta
organización se asemeja al Hezbollá que dice: “El Líbano es un país
de una gran diversidad, sólo representamos una fracción y nuestro
objetivo es construir con todos los progresistas libaneses una economía
nacional independiente.” Quisiera señalar de paso que nadie se
cuestiona este aspecto en relación a países como la Arabia Saudí. Su proyecto es una economía capitalista caracterizada por
una intervención importante del Estado. ¡Tengamos en cuenta que
actualmente, incluso los liberales europeos desean una intervención del
Estado! Si observan Irán, tienen un régimen islamista: con un sistema
capitalista y con la intervención del Estado, pero rechazando las
dominaciones exteriores y redistribuyen las riquezas procedentes del petróleo.
Por lo que se refiere al Hamas, es necesario saber que no es su programa
esencialmente social el que seduce a los palestinos sino el hecho de que
este movimiento personifica la resistencia. Y hoy, la resistencia es lo
que cuenta más para el pueblo de Palestina. Su visión del rol de la mujer es diferente de la teoría
a la práctica. ¿Por qué? Pues en Palestina, la situación es muy difícil,
las mujeres deben trabajar para ganar su propia comida y criar a sus niños.
El Hamas nunca podrá impedirles que trabajen y tampoco forzarles a volver
al rol de amas de casa, aparte de algunos ricos países petrolíferos,
nadie piensa de esa manera en el mundo árabe. ¿Cómo el Hamas podría
retirar de la sociedad más del 50% de la fuerza de trabajo palestina? En
realidad, el que no respeta a la mujer es el que cree que es posible
controlarla como un sujeto pasivo. El Islam no se ve bien en Europa porque esta se identifica
con el cristianismo, entonces hay un verdadero rechazo de la contribución
musulmana al desarrollo de la civilización occidental. En tanto que grupo
islamista, el Hamas es mal visto. ¿Pero por qué una persona, que condena
el sionismo, tiene un problema con el Hamas? ¿Y por qué la misma
persona, que apoya la causa irlandesa, no tiene ningún problema en lo que
se refiere a una organización católica? Las diferencias culturales
explican eso y es un fenómeno que se puede observar. El problema de la izquierda europea, es que se niega a
hacer una gran alianza contra el imperialismo, debido al Hamas, a las
mujeres con velo y toda clase de pretextos. En realidad, se deja llevar
por la gran alianza de los cristianos contra el Islam, vuelve a entrar en
la 'guerra de las civilizaciones' lanzada por los ideólogos americanos.
Sufre, muy profundamente, esta influencia, mucho más que lo cree. ¿Por
qué la izquierda europea no se irrita cuando fascistas cristianos, como
los falangistas, masacran el Líbano? Por mi parte, como laico, apoyé la
resistencia de los irlandeses contra la ocupación británica y no tenía
ningún problema con el hecho de que estos irlandeses eran católicos. En
realidad, el problema del europeo, es que ha crecido en una civilización
que tiene prejuicios sobre los judíos y los musulmanes. Palestina es un pequeño país que -a pesar de todo- se
convirtió en uno de lo que está en el juego más importante en el mundo
por dos razones. La primera, es que el Estado colono que fue creado, debe
ser defendido por las potencias imperiales, los Estados Unidos y Gran
Bretaña, para volverse el elemento dominante de Oriente Medio. Es el
medio de aplastar el movimiento revolucionario democrático en la región,
si aplastan la causa palestina, impiden una alianza del mundo árabe con
todas las líneas de resistencia en Irak, en el Líbano... Antes, era el
Sha de Irán que desempeñaba el papel de policía en la región, los
Estados Unidos habían colocado una dictadura militar para servir sus
intereses en la región. En la actualidad, es Israel. Uno de los ejemplos
más destacados de esta práctica es la revolución en Yemén del Norte en
los años 60. Un golpe fue perpetrado por algunos funcionarios sostenidos
por Egipto para instaurar una República democrática. El Cheik que dirigía
Yemen, huye hacia Arabia Saudí. Entonces, los británicos organizaron
tropas contra la joven República para aplastar el movimiento nacionalista
árabe e implicó a soldados, entrenados por Israel, para combatir las
fuerzas de liberación. Israel envió también milicias a El Salvador, Sri
Lanka, Colombia... En realidad, por todas partes donde los Estados Unidos
se introducen, Israel fue o esta implicado. El mensaje es: “Israel estará siempre allí, incluso
con armas nucleares y puede imponerles lo que quiera”. No, porque del otro lado hay combatientes que no tienen ya
nada que perder y que están dispuestos a sacrificarse, cosa que no se
encontrará en las filas a Tsahal. Con su ataque, Israel no obtuvo nada de
fondo, muy al contrario, el Hamas va a salir reforzado de este conflicto.
Incluso en Cisjordania, la gente dice que si hoy hubiera elecciones, votarían
por este partido. En realidad, los que resisten ganan siempre. |