Este 2 de Abril se cumple un nuevo aniversario de la recuperación de nuestra Islas Malvinas por las Fuerzas Argentinas Argentinas.

En 1982 fuimos atacados por las fuerzas armadas del Reino Unido que contaban con el apoyo irrestricto de Estados Unidos, a pesar de su actuación hipócrita como "mediadores".  Londres y Washington/Nueva York mataron a nuestros bravos aviadores de la Fuerza Aérea, martirizaron a nuestros marinos del crucero "General Belgrano", y masacraron a nuestros jóvenes soldados y suboficiales y oficiales del Ejército.

Argentina perdió aquella batalla y el Enemigo - que entre 1976 y 1983 había asistido y apoyado a los golpistas Videla, Harguindeguy, Menéndez, Martínez de Hoz, Cavallo y Alemann -, en 1983 nos volvió a castigar imponiéndonos su "democracia", sucesivamente gerenciada por Alfonsín, Menem-Cavallo, De la Rúa-Cavallo y, hoy, Néstor Kirchner.  Cada uno de estos verdaderos agentes - conscientes o no - llevaron a cabo una parte de la destrucción económica, financiera, cultural, militar, social y política de nuestra nación.  La repugnante y desfachatada traición de nuestros "dirigentes políticos" no sólo sigue hoy activa, sino que parece profundizarse y consolidarse día a día.  Así nos fue.  Así nos va.  Así nos irá.

Hoy, un cuarto de siglo después, ese mismo Enemigo sigue atacando con aún mayor ferocidad a pueblos mártires en Irak, Afganistán, Palestina y el Líbano. Bombardea cruelmente sus ciudades abiertas y milenarias - Bagdad, Beirut, Basora, Mosul, Tikrit, Kabul, Tiro, Gaza, Hebrón... Nada ni nadie los puede detener.  Nada ni nadie se salva: matan y desmiembran a mujeres, niños y ancianos; destruyen sus viviendas, infraestructura de servicios públicos, hospitales y escuelas.  Construyen vergonzosas murallas de oprobio contra sus vecinos y torturan.  Todo los hacen "legalmente" pues tienen el poder y lo utilizan salvajemente.  Han transformado el Terrorismo de Estado como nueva doctrina de Seguridad Nacional contra cualquiera en cualquier parte del mundo. 

Ese Enemigo parece siempre operar desde los mismos tres Estados Nacionales en los que se ha enquistado: Estados Unidos de Norte América y el Reino Unido de Gran Bretaña, a su vez subordinados a sus mentores y mandantes sionistas dentro y fuera del Estado de  Israel. 

Nuevamente, los mismos intereses centrados en Londres, Washington/Nueva York y Jerusalén/Tel Aviv.  El paralelo entre todas estas guerras es particularmente significativo para los argentinos. Para quienes observamos el mundo desde una óptica auténticamente independiente - o sea que no lohacemos a través de los vidrios de color de CNN, Fox, BBC, La Nación, Clarín, Infobae - no se trata de estar o no estar de acuerdo con Galtieri, Saddam, los Talibanes, Hamas o Hezbollah.  Se trata de rescatar la sana y viril reacción del pueblo argentino de entonces, y de los pueblos de Irak, Palestina, Afganistán y el Líbano de hoy, que no toleran que vengan botas invasoras a destruir su suelo y matar a su gente.

El valor de la Gesta de Malvinas no tiene nada que ver con la soberbia torpeza de la junta militar del General Galtieri, quien en su absoluta ignorancia sobre cómo funciona realmente el mundo cometió el inaudito error de confiar nuestra "diplomacia" a Nicanor Costa Méndez al tiempo que dejaba la economía en manos de Roberto Alemann: ambos miembros fundadores del CARI - Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales - operadora local del poderoso Council on Foreign Relations de Nueva York (junto a otros notables miembros como Mariano Grondona, Fernando de la Rúa, Roberto Lavagna, José Octavio Bordón, Adalberto Rodríguez Giavarini, Natalio R. Botana, José M. Dagnino Pastore, Rosendo M. Fraga y Jorge Wehbe). 

Tampoco debemos confundir el heroismo en Malvinas con la sórdida cobardía del Gral. Mario Menéndez, quien para salvar su péllejo, nos quitó el símbolo heróico que hubiera significado que un general de la Nación Argentina - (¡por Dios, al menos UNO!) -actuara con coraje y Honor, dando su vida por la Patria.

Rescatemos la bravura de aviadores como Gustavo García Cuerva, marinos como Pedro Giacchino, oficiales como Mohammed Seinheldín, y los bravos soldados artilleros que defendieron Puerto Argentino hasta el último momento y hasta el último aliento. 

Este 2 de abril, pensemos en quienes son nuestros verdaderos Enemigos externos, y quienes son sus eternos aliados internos, artífices de las "relaciones carnales" con el Imperio, y eternos "porteros del país" dispuestos a franquearle el paso a cada caballo de Troya - económico, político y cultural - que el Enemigo usa contra nuestra Patria para saquearnos.

¡Abramos los ojos!   ¡Miremos bien quienes son los que desde siempre incendian el mundo!

Comprendamos que lo que ayer fueron las destrucciones a sangre y fuego de Berlin, Hiroshima, Hanoi, Tokio, Hamburgo, Dresden, Hue, Munich, y Belgrado; y que hoy vemos repetirse en Beirut, Bagdad, Basora y Kabul; pronto podrá sobrevenir en Bogotá, Brasilia o Buenos Aires.  Se trata del mismo Gran Enemigo Mundial que controla férreamente las estructuras de Poder Real privado del Nuevo Orden Mundial.  Se mimetiza con Estados Unidos y con el Reino Unido pero, en verdad, está por encima de toda nación y tiene un poder y alcance planetarios.

Abramos los ojos: ayer incendiaron Europa y Asia, hoy masacran a Palestina, Irak, Afganistán y el Líbano, mañana no titubearán de hacerlo con nosotros.

El 2 de Abril de 1982 fue el inicio de la Gesta de Malvinas y hoy debiera marcar un hito en el largo camino para recuperar nuestra absolutamente perdida Soberanía Nacional.  En forma similar, mayo de 1948, octubre de 2001 y marzo de 2003 marcan los inicios de las Resistencias Nacionales de los pueblos de Palestina, Afganistán e Irak, respectivamente, ante invasores genocidas.  No nos durmamos. ¡ESTA es la Hora de los Pueblos!

Nos guste o no, estamos inmersos en una gran guerra mundial.  Esta guerra se nos está viniendo encima a nosotros también.   Son tiempos de tomar una decisión clave:  o sea colabora con el Enemigo, o se lo Resiste por todos los medios posibles.

¡¡Honor y Gloria a los argentinos caídos en Malvinas!!   ¡¡Viva el Pueblo Argentino!!

¡¡Viva todos los Pueblos del Mundo que resisten y luchan por su Independencia y Soberanía!!