MEGAMINERÍA Y FALSO INDIGENISMO EN TUCUMÁN

por Ernesto Damián Sánchez Ance

 

Como muchos de quienes reciben de tanto en tanto mis mails saben, yo estoy en contra del pretendido Indigenismo que se experimenta en Tucumán. Un Indigenismo de criollos y mestizos que no solo no hablan ningún idioma originario, sino que tienen una cultura muy influenciada por España.

Cinco años atrás, tuve un poco amigable intercambio de correos electrónicos con el Sr. Juan José Carrazano, integrante de uno de tantos grupos supuestamente indígenas de la provincia, en que le expresaba lo siguiente:

“Ustedes se oponen a la minería, pero cuando los gringos de las empresas mineras les ofrezcan unos Euros varios de ustedes se meterán su discurso por la parte del cuerpo donde la espalda pierde su digno nombre. Ustedes solo se mueven por el “qolqe” y otros beneficios. A ustedes les importa muy poco restaurar la cultura que quieren hacer creer que les pertenece. Ni siquiera saben que es un “ayllu”, no saben que es el “ayni” ni la “mink'a”, ni les interesa porque seguramente dichas pautas culturales están reñidas con vuestras prácticas propias de punteros políticos del Partido Justicialista”.

http://www.tsunamipolitico.com/respuesta709.htm

Mi pronóstico no se basaba en elucubraciones mías, sino en datos que me daban algunos disidentes de esos grupos de supuestos indígenas y, en efecto, los hechos terminaron confirmando lo que yo siempre creí. Es así que El Periódico de Tucumán, en su edición del Viernes 10 de Febrero de 2012, en la página 5, informa que el supuesto pueblo diaguita se opone a la megaminería, haciendo mención a hechos como que, según los integrantes de los pueblos que se autodenominan diaguitas, el “cacique” de Amaicha, Lalo Nieva, tiene acuerdos económicos con Minera La Alumbrera. Y como si con esto no bastara, dice Mario Quintero, de Amaicha: “estamos viendo que se hará con la fiesta de la Pachamama, porque los últimos años se le venía pidiendo plata a La Alumbrera”.

Como queda demostrado, estos diaguitas o calchaquíes modelo Siglo XXI, nada tienen que ver con Juan Calchaquí ni con Chelemín, sino que han copiado las mañas de Pedro Bohorquez, el falso Inca del Tucumán.