PERÓN: UN PERRO MUDO
por Alberto Buela (*)
En estos días que estamos en plena campaña electoral las estadísticas aparecen por todos lados. Y cuánto más pagas mejores son los datos para quien las paga. Y el que no las puede pagar: ese sí que está jodido, pues todas las estadísticas se le vienen en contra. Así es la política menuda y casera y de ese talante moral son sus esbirros los consultores.
Nosotros que no creemos en las estadísticas por aquello que enseñaba ese gran filósofo peruano, Wagner de Reyna: “pues, no se puede cuantificar lo cualitativo”, nos tomamos el trabajo de hacer el listado de gremios que publicaron algún tipo de aviso el viernes 1 de julio, nuevo aniversario de la muerte del general Perón.
Nos fuimos a almorzar a un sindicato amigo y tomamos los dos diarios más leídos por los laburantes : Crónica y el Popular y contabilizamos 39 sindicatos, uniones y federaciones que “se acordaron de Pocho el Grande”.
Treinta y nueve sobre casi tres mil gremios inscriptos y 1500 con personería gremial. Treinta y nueve organizaciones sindicales sobre unos noventa gremios que “hacen política”.
Claro está, que solo cuatro de “los gremios kirchneristas” publicaron aviso y desobedecieron las órdenes embozadas del “Cristinismo” de no honrar a Perón.
Desde el gobierno de Cristina no salió ni un solo comentario ni un solo aviso de recuerdo ni nada. Lo ignoraron completamente. Perón es un perro mudo.
Esta tesis de Perón como perro mudo es uno de los ideales más viejos y sostenidos del kirchnerismo, ya le pasó al viejo Cafiero cuando fue a buscar apoyo a la Casa Rosada para el monumento a Pocho: “para el Viejo, no hay nada”, fue la respuesta tajante y explicita.
A ver si nos entendemos, nadie está hablando mal del gobierno de Cristina. Sólo estamos relatando lo que son, estamos describiendo hechos, y goles son amores.
Y los dos hechos brutos y concretos producidos en la última semana por el gobierno son: el desplazamiento del sindicalismo de todos los cargos políticos y el silencio más absoluto ante el aniversario de Perón.
¿Quieren más? Les puede peguntar la Mole Moli. ¿qué quieren secretarios generales de gremios? ¿Qué Cristina salga a los balcones de la Rosada y les diga: los sindicatos son una rémora. No me interesa Perón en absoluto. A nuestros sindicalistas, algunos luchadores loables y tipos extraordinarios, por lo amigos, por lo compañeros, por lo solidarios, por lo honestos, por lo austeros, por lo patriotas. Les está pasando hoy lo que le pasó al bello Alcibíades con Platón: Va el joven Alcibíades a pedirle a Platón que le enseñe filosofía y Platón le señala un caballo que pasaba por la calle: ¿ Vés Alcibíades, la caballidad del caballo, pregunta Platón?. No maestro yo solo veo un caballo tordillo. Pues bien Alcibíades, veo que tú tienes ojos del cuerpo pero te faltan los ojos de la inteligencia”.
Y
en este caso pasa lo mismo, no ven, no quieren o no pueden ver que los
intereses del gobierno son distintos y diferentes de los del movimiento
obrero organizado. Ven lo que aparece: la propaganda y lo que el gobierno
dice pero no ven lo que el gobierno hace con ellos y sus organizaciones.
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