Las
'avanzadas' de la máquina de guerra de EEUU en América del Sur
En 1999, cuando el Pentágono dejó Panamá y la base militar Howard con
'responsabilidad' sobre el canal homónimo, se posicionó nuevamente no
solo en América Central.
Lanzó una fuerte ofensiva sobre la región andina y norte de América
del Sur iniciando el Plan Colombia, y logrando establecer cuatro nuevas
bases, afirmando que su función era combatir el narcotráfico. Fueron
situadas próximas a sendos aeropuertos internacionales, mediante
convenios por 10 años con gobiernos comprometidos de tres países. EEUU
construyó dos de tales instalaciones, sobre el océano Pacífico en
Manta (Ecuador) y en Comalapa (El Salvador), y otras dos sobre el mar
Caribe justamente frente a Venezuela, en Aruba y Curazao con un convenio
con el gobierno de Holanda.
De ese modo, extendió su presencia física al Canal de Panamá, el
Caribe y la región nor-andina de América del Sur.
En 2009, EEUU deberá dejar en forma definitiva la base de Manta, por
una decisión soberana del gobierno de Ecuador. Nuevamente el Pentágono
está desplegando una fuerte embestida expansionista para imponer su
'presencia', pero ahora con nuevas concepciones.
En un informe para el Departamento de Defensa, la Rand Corporation
considera como 'territorios sin gobierno' a las regiones fronterizas de
Venezuela/Colombia, Pakistán/Afganistán, Cáucaso, oriente y occidente
de Africa y Mindanao (Filipinas).
En el re-alineamiento global de bases, el Pentágono prevé renunciar a
algunas del millar de bases no secretas que tiene en un centenar de países
(con un total estimado en más de 5000 instalaciones militares
extraterritoriales), a costa de establecer nuevas instalaciones llamadas
Centros de Seguridad Cooperativa (CSL), en otros 100 países.
En esta segunda expansión mundial, EEUU incluye el asentamiento de
estas bases 'cooperativas' en los planes del nuevo Comando para Africa,
y como se verá en América Latina en el marco del Comando Sur,
avanzando sobre Argentina hacia el extremo austral del continente.
Situación regional
En Colombia, el gobierno de Uribe/Pentágono está implementando el plan
Colombia II, que incluye tomar el control militar de dominios bajo
influencia de las FARC, para posteriormente desplazar población y abrir
los territorios a los grandes capitalistas del agro-negocio mundial, y a
las grandes compañías petroleras internacionales.
En Bolivia, EEUU está detrás de un plan de guerra no militar (por
ahora), fogoneando un cambio de régimen local a su favor, y una
desestabilización controlada de la región, mediante un colapso
secesionista dirigido por la oligarquía y los terratenientes
reaccionarios de los departamentos orientales.
En Paraguay, el Departamento de Estado preveía una potencial amenaza
para los intereses estadounidenses, con el triunfo de Fernando Lugo. La
base militar mariscal Estigarribia es hasta ahora uno de los nodos mas
importante de su red de avanzada Sur.
Por otro lado, Gran Bretaña tiene control militar sobre el Atlántico
Sur mediante la base Malvinas. Sitio geoestratégico que involucra una
ruta inter-oceánica alternativa en caso de bloqueo del Canal de Panamá.
El aumento en el consumo mundial de energía y las reservas finitas de
los yacimientos de hidrocarburos, está transformando en rentables
reservorios marinos que antes no lo eran. Tal el caso de aquellos al
sudeste de Malvinas, en los que Gran Bretaña tiene adelantada su
exploración y comienza su explotación. Pretende extender la zona
exclusiva hasta casi las costas de Argentina, y hacia el 'continente
blanco' con fuertes presiones para romper anticipadamente el compromiso
internacional Antártico (que vence en 2048), y también liberalizarla
para la explotación minera, de agua dulce y la mercantilización en
gran escala. Hay que tener presente que 'Argentina fue un caso rarísimo:
el único país del mundo que perdió su petróleo sin guerra
mediante...' (1)
Concomitantemente, el Comando Sur de EEUU (USSOUTHCOM) necesita
prolongar su presencia física sobre la parte continental y marítima en
el 'cono sur', para ir completando su estructura de comando regional
centralizado para 'despliegue rápido'.
EEUU prepara el terreno para avanzar en Argentina
En una publicación del gobierno de la provincia del Chaco de hace
aproximadamente un mes, mezclada dentro de un largo listado de noticias
oficiales de Interés General, pasaba casi desapercibida la siguiente :
'Funcionarios chaqueños se capacitan con un programa de ayuda
humanitaria' (26/3/08). (2)
Esta información, se refería al taller para capacitación de
funcionarios e integrantes de los municipios del interior del Chaco,
dictado por un consultor salvadoreño contratado por el Comando Sur de
EEUU, en el marco del Programa de Asistencia Humanitaria (Humanitarian
Assistance Program; HAP) que se quiere implementar en la provincia a
partir de un convenio suscripto entre el Gobierno provincial, la
Embajada de EEUU y el Comando Sur del Ejército de ese país, a través
del cuál esta institución brinda asistencia técnica, para el armado
de los programas y sistemas para la asistencia en la emergencia
ambiental, y acciones que se enmarcan en el HAP.
El subsecretario de Seguridad y Justicia de la provincia del Chaco,
Patricio Fiorito manifestó respecto a la gran cantidad de participantes
de las localidades del interior, que : 'el objetivo es que los
municipios elegidos para el desarrollo de esta primera etapa, para armar
sus juntas municipales de defensa civil, designen entre cuatro y cinco
personas que garanticen la continuidad de las mismas...'
Es de notar, que el mismo Imperio y su gestión cívico-militar que está
produciendo la criminal carnicería en Irak y Oriente Medio, está hoy
en Argentina dándonos 'ayuda humanitaria', y enseñando a los
funcionarios públicos del norte de nuestro país sobre posibles
emergencias en la provincia, habiendo múltiples organismos no militares
nacionales e internacionales cuya actividad no trasciende de ser
realmente solo una misión social y humanitaria.
Es conocida la doble misión de las embajadas y los organismos militares
de EEUU, en los diversos programas civiles y militares de ese país para
'ayuda', capacitación, intercambio, cooperación, trabajo bilateral y
ejercicios combinados para los países (también se incluyen las
relaciones científico-técnicas).
Por un lado, Washington presenta una componente visible al público,
estructurada sobre actividades que la sociedad visualiza como 'justas' y
en su beneficio, de modo tal que pueda justificarse una interacción
bilateral. Causas como ayuda humanitaria, sanidad y salud pública,
emergencias y desastres naturales, derechos humanos, seguridad, lucha
contra el narcotráfico y el narcoterrorismo.
Pero por otro lado, existe una componente no visible que se encuadra en
los objetivos estratégicos afines a los intereses de EEUU y
contrapuestos a los del país asistido.
El gobierno de Argentina viene manteniendo acuerdos de cooperación para
la defensa con EEUU (y Gran Bretaña), en el plano militar y civil. Sea
por ejemplo para capacitación de civiles con instructores
estadounidenses, como el programa Internacional para Educación y
Entrenamiento Militar (Expanded IMET) (3); el programa TCA del Comando
Sur de las Fuerzas Armadas de EEUU (4), el programa de Seguridad de
Fronteras y Control de Exportaciones (NADR), de Asistencia
Antiterrorista y otros. También Washington envía fondos para educación
y entrenamiento policial. En abril de 2007 el jefe del Comando Sur,
James Stravidis, visitó el Ministerio de Defensa de Argentina.
En los acuerdos en el plano ambiental por ejemplo, expertos de EEUU
dictaron ultimamente conferencias como 'La Integración Civil Militar en
la Asistencia a Desastres Naturales'.
En este marco, con un acuerdo y reuniones entre representantes de la
embajada de EEUU/Comando Sur con el Ministerio del Interior de Argentina
y el gobierno del Chaco se desarrolla el 'Programa de Fortalecimiento
del Sistema Provincial de Emergencias', que habilita la doble intervención
(visible/encubierta) de EEUU en la región.
Según manifiestan públicamente las mismas agencias de defensa de EEUU
(como el Comando Sur) necesitan la Interacción Militar Extranjera (en
inglés FMI) para : 'mantener un contacto regular que construya
confianza e intercambio de información relevante para la seguridad
regional. Deben conocer como 'trabajan' otros militares (sus
procedimientos, capacidades, comando y control) mirados como importantes
para una futura cooperación. Los militares estadounidenses buscan a
través de los programas, construir relaciones interpersonales con
oficiales extranjeros, amistad y camaradería con los altos jefes y
aumentar el 'acceso' a los militares de la región, convirtiéndolos en
aliados para futuros conflictos, mas responsables respecto de la política
exterior de EEUU, y mas inclinados a 'internalizar' los valores de EEUU
observando los derechos humanos y las relaciones cívico-militares en
democracia...'
Actualmente, los poderes Ejecutivo y Legislativo Nacional autorizaron la
entrada de tropa extranjera al territorio argentino y la salida fuera de
él de fuerzas nacionales para programas de ejercitaciones combinadas,
desde el 12 de noviembre de 2007 hasta el 31 de agosto de 2008. De 10
ejercicios conjuntos conocidos con países limítrofes, en 4 intervendrá
EEUU y tendrán principalmente carácter naval, (como el UNITAS 49, del
21/4 a 2/5/08, en que participa el portaviones estadounidense USS George
Washington). Desde mediados del presenta año, el Pentágono reactivará
una versión moderna de la Cuarta Flota Naval para cubrir desde el
Caribe hasta el Atlántico Sur (como lo hacía durante la Guerra Mundial
II).
Estas 'interacciones' vienen influenciando a las Fuerzas Armadas y de
Seguridad argentinas, donde la ideología antinacional de admiración y
subordinación a las políticas de EEUU tiene peso significativo.
En el ámbito civil, especialmente en el noreste argentino, el Comando
Sur de EEUU no tiene buena reputación, ya que buena parte de los
combatientes veteranos de Malvinas (1982) partieron desde las provincias
de Formosa, Chaco y Corrientes, y en el momento decisivo EEUU (y el
Comando Sur) se alió al enemigo de Argentina dándole además, apoyo
logístico, operativo y de todo tipo. (5)
Así la secuencia de operaciones de guerra política que desarrolla el
Imperio sobre la sociedad, suele comenzar en forma sutil y aparentemente
inocua. Programas de ayuda humanitaria, por ejemplo, operando sobre
puestos clave de la dirigencia local, a través de la cuál deberá
posteriormente influenciarse a la población.
Cuando ha sido alcanzada cierta aceptación de los institutos
estadounidenses por la sociedad, y se ha logrado un nivel de organización,
surgirá ‘naturalmente' la necesidad de por ejemplo, un Centro de
Coordinación Antinarcóticos en la localidad, o algún otro artificio
que requiera de alguna presencia estadounidense.
Las bases militares, no serían ni militares ni bases, sino Centros
de Seguridad Cooperativa...
Los nuevos conceptos ‘flexibles’ del Pentágono sobre 'bases
militares' con un borde difuso en las actividades civiles, maximiza la
'confusión' sobre la opinión publica.
Las nuevas bases, no tendrán el aspecto clásico de enclave militar
operativo. Podrán materializarse como instalaciones aparentemente
inocuas que podrían traer progreso a la zona. Para ello bastará con
que el Pentágono logre disponer de estructuras, terrenos, almacenes,
rutas, aeródromos, puertos que podrán ser concesionados, alquilados
y/o mantenidos por la nación anfitriona, y en servicio con poco
personal estadounidense permanente o temporario. Estas bases encubiertas
listas para ser completamente activadas, podrán tener facilidades y
equipamiento predeterminado para albergar rotación de fuerzas, y actuar
como centros de entrenamiento regionales en operaciones combinadas con
EEUU.
Según sea, las instalaciones pueden presentarse públicamente como no
militares, entre otra razones para que sean aprobadas por los Congresos
de los países colaboracionistas. Pueden mostrarse por ejemplo,
necesarias para control de contrabando, migración ilegal y narcotráfico,
parte de cuya producción podría ingresar al territorio estadounidense.
EEUU focaliza así el tráfico de drogas más como oferta externa que
como demanda, en cuanto al consumo en su propio territorio asumido como
problema social y de salud pública. Igualmente actúa sobre lo que
llama 'terrorismo', bajo el concepto de eliminar sus fuentes aunque para
ello invada países enteros y sean asesinadas miles de personas.
Algunas clases de instalaciones operacionales extraterritoriales del
Departamento de Defensa de EEUU son : Base de Operaciones Principales
(MOB) (fortificaciones militares para comando, control y comunicaciones
con fuerzas operativas permanentes); Base de Operaciones de Avanzada
(FOB) (extensión de la anterior para operaciones especiales, que
incluye aeródromo, fondeadero o muelle); Centro Operativo de Avanzada
(FOL) (similar al anterior pero sin toda su infraestructura,
primariamente usada para operaciones antidrogas); Centro de Seguridad
Cooperativa (CSL) (con poca o sin presencia permanente de los
estadounidenses, mantenida por concesión o por el país anfitrión,
funciona como centro para actividades de cooperación con éste, rotación
de fuerzas, apoyo logístico y acceso ante contingencias). (6)
El Departamento de Defensa (Comando Sur) presenta a las dos últimas
instalaciones con características no militares. Es el caso de las bases
de Manta, Comalapa, Aruba y Curazao, por ejemplo, que las clasificaba
como FOL (es decir para lucha antidrogas) y luego fueron redefinidas
como CSL (de cooperación).
Curiosamente, los Centros de Seguridad Cooperativa (CSL) de Manta,
Comalapa, Aruba y Curazao están en lugares geográficos privilegiados
con pistas de aterrizaje de 2,4 kilómetros para aviones pesados, con
capacidad para operación nocturna de aeronaves en cualquier situación
meteorológica, control de tráfico aéreo, equipos de abastecimiento de
combustible, bomberos, hangares, oficinas y almacenes.
Se registra la presencia continuada de aeronaves de combate, como los
cazas supersónicos a reacción F-16 y F-15 (7), aviones de
reconocimiento y patrulla Orión P-3, aviones de Inteligencia de señales
E-2 AEW, E-3 AWACS, aviones de rescate y tanqueros para reabastecimiento
de combustible en vuelo como el Hércules HC-130, de transporte táctico
como el Hércules C-130 y helicópteros, entre otros.
Hay abundante evidencia que en estas instalaciones de EEUU y en otras de
mucho menor perfil, se realizan en los hechos, operaciones militares
encubiertas de la más diversa índole y que cumplen múltiples
funciones estratégicas.
Entre otras, apoyar ataques militares contra organizaciones rebeldes
locales que estorben los intereses de EEUU y sus aliados, guerra de
Inteligencia de señales (electrónica y de comunicaciones) que permite
detectar la posición de los blancos, identificarlos e implementar el
ataque con bombas inteligentes (como lo acaecido con el bombardeo al
campamento en que murió Raúl Reyes).
Las instalaciones estadounidenses cumplen además misiones de vigilancia
y espionaje de los sistemas de armas y Fuerzas militares del país
anfitrión y sus vecinos. Acciones de infiltración, relevamiento,
influencia y control sobre las Fuerzas Armadas y poblaciones de los países
(con el engaño que le traerán progreso local, bienestar económico,
empleos y seguridad). La presencia militar latente de EEUU en la región
facilita su plan de 'despliegue rápido' regional y global de sus
fuerzas de tareas ante conflictos. También actúan como elemento político
'disuasor', afín a los intereses económicos de Washington.
Una de las metas de las operaciones de Inteligencia de EEUU en Argentina
es cristalizar, poco a poco, una progresiva 'presencia' estadounidense
en el país, aunque no necesariamente signifique 'permanencia'.
En un principio a nivel cooperativo y humanitario con bajo perfil hasta
sentar las condiciones, y en el momento oportuno alcanzar la intervención
militar 'negociada'. Ya ha ocurrido en varios países. Filipinas por
ejemplo, canjea su deuda externa por presencia militar estadounidense...
Notas:
1) ‘Palabras de presidente del MORENO en el cierre del acto
conmemorativo del 6º Aniversario, realizado el día 8 de abril’,
18/04/2008, ARGENPRESS.
2)http://chaco.gov.ar/PrensaChaco/Publicacion/
3) Programa Internacional para Educación y Entrenamiento Militar
(Expandido), en inglés U.S. Expanded International Military Education
and Training (E-IMET) program (Ver http://justf.org).
El manual del E-IMET es publicado anualmente por la Agencia de Cooperación
para la Seguridad y la Defensa (Defense Security Cooperation Agency
(DSCA)).
4) El Programa TCA del Comando Sur de las Fuerzas Armadas de EEUU
consiste de actividades de 'cooperación' desarrollados con fondos
asignados por el Comando Sur.
TCA es la sigla en inglés de Actividades CINC Tradicionales
(Traditional CINC Activities). CINC significa Comando en Jefe
(Commander-in-Chief), consiste en que el Comando Sur otorga fondos
anuales que llegarán a los jefes de las fuerzas armadas de países
latinoamericanos que realicen actividades militares de interacción con
EEUU. El 'paquete' incluye : entrenamiento de fuerzas, contingencias,
operaciones especiales, comando y control, ejercicios conjuntos,
capacitación a personal civil y militar, gastos individuales para el
personal extranjero interviniente en los programas bilaterales, y
actividades humanitarias y de asistencia cívica.
5) R. Núñez, Crítica Digital,
www.criticadigital.com/index.php?secc=nota&nid=2756
6) En inglés MOB : Main Operations Base; FOB : Forward Operations Base;
FOL : Forward Operating Location; CSL : Cooperative Security Location.
7) Los F-15 y F-16 tienen capacidad para lanzar bombas inteligentes y la
bomba nuclear B61. En sus distintas variantes fueron utilizados por EEUU
en numerosos conflictos bélicos como Irak, Afganistán y Balcanes; en
Oriente Medio por Israel y Arabia Saudita, y en la ex-Yugoslavia por la
OTAN.