Sanson
vuelve a Gaza
La operación de
martirio
de Sansón, tanto como el
suicidio
colectivo de Masadá, o la
revuelta
de los macabeos, forman la base de la educación nacional y religiosa
de la juventud
judía. Así pues,
¿qué es lo que
los judíos israelíes no terminan de entender de las actuales
operaciones palestinas de martirio?
"Había
una celebración entre los filisteos, así que fueron a buscar a Sansón, y
éste fue traído al festejo, para poder ser insultado con sus copas. He
aquí que Sansón, consideró una de las mayores desgracias el no ser capaz
de vengarse al ser así insultado, y tan pronto como llegó a ellos los
embistió con fuerza derribando el edificio al desplazar sus pilares, con
tres mil hombres dentro, que fueron muertos, y Sansón con ellos. Y en
verdad este hombre debe ser admirado por su fuerza y coraje, y por su
magnanimidad en su muerte, y porque su ira contra sus enemigos fue tan
lejos como para morir con ellos. Era alguien de extraordinaria virtud.
Pero los suyos cogieron su cuerpo, y lo enterraron en Sarasat, su propio
país, con los restos de su familia".
Esta es una de las primeras operaciones de martirio registradas desde
los tiempos antiguos. No se puede decir que sea la única, pero sí ha
llegado a ser conocida en todo el mundo. Ocurrió hace unos 3.000 años,
pero sigue siendo relevante y actual hoy día. La gente aludida, el
lugar, e incluso la
situación son familiares a todo aquel que esté al tanto de lo ocurrido
en Palestina en los últimos diez años.
Sin embargo, los lazos entre este suceso y las operaciones de hoy día
van mas allá de la mera similitud física y circunstancial. Lo que hay
bajo la superficie es también enormemente familiar y nos aporta una
interesante lección sobre la actualidad.
El
autor de la cita anterior es Flavio Josefo, un académico judío. Está
tomada de su célebre "Antigüedades de los Judíos", Libro V, capítulo 8.
Josefo nació en Jerusalén pocos años después de la época de Jesús,
durante el tiempo de la ocupación romana. Además de historiador, era
sacerdote y soldado. Este bagaje le permitió escribir desde una posición
privilegiada, y hace más ilustrativo su relato. De hecho, el informe de
Josefo, sumamente directo, nos lo dice todo al respecto de las
operaciones de martirio. Incluso su silencio sobre ciertos aspectos es
educativo.
Los
filisteos estaban pasándoselo bien y se burlaron de Sansón. No pudo
soportar la humillación. Ardía en deseos de venganza. No existe una
razón política ni religiosa para esta furia. No son necesarias, aunque
no hubieran resultado extrañas. Otros autores han escrito que Sansón
rezó así: "¡Oh Soberano Señor, acuérdate de mí! ¡Oh Dios, por favor dame
fuerzas una vez más, y que con un solo golpe tome
venganza
sobre los filisteos por mis dos ojos! ¡Déjame
morir con los
filisteos!".
En
cualquier caso, estaba estableciendo una declaración moral sobre sí
mismo. Mientras estuvo encadenado, podría haberse arrepentido de su
pasado, podría haber pedido perdón. Podría haber acabado con su vida,
bien por su propia mano, bien pidiéndoselo a alguien. Sansón no mostró
intención alguna de hacer algo de esto. Simplemente
quería venganza,
nada más que la muerte de 3.000 personas, incluso si esto significaba
acabar con su propia vida en el acto.
Estaba dispuesto a pagar
con su vida para matar a sus enemigos.
Probablemente, cuando los filisteos conocieron la masacre de sus
compatriotas, desarrollaran una pobre opinión de Sansón. Claramente, por
lo tanto, Josefo no dedicó ni una sola línea a recoger su reacción.
Josefo sólo menciona a los filisteos para decir que insultaron a Sansón
y que eran tres mil en número. Existen razones para pensar que a Josefo
no le hubiera disgustado referirse a seis mil. Ambas cifras parecen una
exageración, pero la intención de Josefo era hacer la historia de Sansón
tan ejemplarizante como fuera posible. Lo que Josefo realmente desea es
celebrar la acción de Sansón como un
legado para la
posterioridad.
Al
escribir su relato, Josefo menosprecia a los filisteos, alaba a Sansón,
apoya su postura, comparte su ira contra el enemigo, se regocija del
resultado de sus acciones, declara la vida de Sansón como virtuosa y no
se olvida de remarcar que tuvo una digna sepultura.
Ni
Sansón ni Josefo podrían haber argumentado desconocer que entre los tres
mil filisteos que asistían a los festejos podría haber
mujeres, niños y ancianos,
que morirían en el suceso. Sansón intentó hacer
el máximo daño con su
acción; Josefo, la
máxima propaganda.
La
operación de martirio de Sansón, tanto como el suicidio colectivo de
Masadá, o la revuelta de los macabeos, forman la base de la educación
nacional y religiosas de la juventud judía. Así pues,
¿qué es lo que los judíos
israelíes no terminan de entender de las actuales operaciones palestinas
de martirio?
Volvamos a Josefo: "había una celebración popular entre los filisteos
donde podrían insultarle con sus copas".
Que Israel permanezca a
horcajadas de los palestinos y creciendo a su costa es una perogrullada
tal que incluso la ONU lo ha condenado un centenar de veces. Que Israel
se considere a sí misma la única democracia en Oriente Medio; mientras
sigue siendo la responsable directa de millones de refugiados
palestinos; mientras continúa impidiendo que éstos y sus descendientes
vuelvan a sus hogares; mientras sigue robando más y más tierra
palestina, particularmente desde los acuerdos de Oslo de 1994; mientras
mantiene a más de 7.000 palestinos presos o bajo detención
administrativa en precarias condiciones penales y condena al gueto a más
de tres millones de habitantes de Gaza y Cisjordania en pequeños
bantustantes. Y que aún así siga logrando el apoyo de la mayoría del
mundo occidental, configura tal afrenta a todo sentido de justicia y
decencia, y a los propios valores que los Estados miembros de Naciones
Unidas suscriben, que no sería de extrañar que varios miles de Sansones
se alzaran llenos de furia en su contra.
Estos nuevos
Sansones modernos
tienen diferentes nombre:
Hamas, Jihad Islámica,
Brigadas de Mártires de Al Aqsa, etc.
Qué extraño !! Sanson era considerado
mártir.
Los palestinos.....
terroristas
!!
Josefo de nuevo: "He aquí que Sansón, consideró una de las mayores
desgracias el no ser capaz de
vengarse
al ser así insultado". La
gente encuentra difícil soportar la humillación y está claro que Sansón
estaba deseando sacrificar su vida para así hacer pagar a sus enemigos
por sus crímenes contra él.
¿Acaso el deseo de
venganza de los palestinos, frente a las expulsiones, robo de tierra,
asesinato de hombres, mujeres y niños inocentes, demoliciones de
viviendas, torturas, maltrato y desesperanza.... es diferente en algo?
La
necesidad de venganza es profunda en los seres humanos, y una de las más
íntimas. Es fácil entender que una persona palestina u otra-, parada
de larga duración, que ha visto su hogar arrasado, su hermano asesinado
a sangre fría, su tierra robada sin derecho a queja o compensación
alguna, sus hijos malnutridos y sin futuro, elija castigar a aquellos a
quienes considera culpable de sus desgracias y que disfrutan de lo que
ella no puede.
"...Derribando el edificio, al desplazar sus pilares, con tres mil
hombres dentro, que fueron muertos, y Sansón con ellos"
Josefo enumera los sucesos en el orden necesario para su propósito.
Lo
primero es dejar claro que la voluntad de Sansón se ha puesto en marcha.
Lo que ocurre después es el resultado de la acción de Sansón. Es el
único personaje activo, y lo único que importa es su pensamiento y
acción.
El
segundo paso es subrayar el éxito de la operación. No hay supervivientes.
Este sería un caso de desgracia jamás vista si comparamos las cifras de
asistentes al festival y a las víctimas. De hecho, no es simplemente
mala suerte, sino una necesaria conclusión de la lección que Sansón está
dando a los filisteos, y sobre todo una lección que Josefo está dando a
las futuras generaciones de judíos. Un número menos de víctimas y la
inclusión de algunos heridos no sería lo suficientemente didáctico.
Finalmente, el lector es informado de la muerte de Sansón. Esto se hace
con un mínimo número de palabras y no demasiado énfasis. Es casi como si
la muerte de Sansón se hiciera de pasada: "tres mil hombres murieron, y
simplemente Sansón con ellos".
Por
una parte su muerte no precisa de comentario adicional. No era la muerte
de Sansón lo importante, sino el precio a pagar por su
venganza.
La venganza era el objetivo y fue alcanzado. La venganza es más
importante que la vida. Por ello, la muerte no puede ser importante. Por
otra parte, el significado de su muerte es más importante. Es por eso
que Josefo destaca lo siguiente: "Y en verdad este hombre debe ser
admirado
por su fuerza y coraje, y por su magnanimidad en su muerte "
El
historiador deja paso al soldado, quien procede a presentar el ataque de
Sansón. Aparece el retrato del
héroe perfecto.
Sansón es un héroe que debe ser admirado por su coraje, fuerzas y
magnanimidad. ¿Qué más puede pedir un orgulloso soldado? Tres cumplidos
para describir en una única frase corta el asesinato de tres mil
personas.
Josefo quiere extraer
lo mejor de la venganza
de Sansón para sus
propios propósitos educativos. La muerte de Sansón es el momento
apropiado para que sea el sacerdote el que continúe la tarea. El autor
pasa de describir sin detalles los momentos previos a la muerte, a
educar a través de adjetivos morales los resultados de los hechos.
Mostrar las cualidades de Sansón es la única cosa que importa ahora. La
descripción se convierte en plegaria, de manera que los alumnos
encuentren sin problemas la relación entre lo que Sansón hizo y su
condición de héroe asombroso y atemporal.
¿Y
le admirarán por la gran mortandad que causó? ¿Por su método de ataque?
¿Porque siguió el mandato de Dios? No, lo harán porque "porque su ira
contra sus enemigos fue tan lejos como para morir con ellos". Josefo
quiere que sus lectores recuerden, sobre todo,
la ira de Sansón hacia sus
enemigos. Para satisfacerla Sansón está dispuesto a morir, y esto se
convierte en algo más importante que la propia vida.
El resto sólo se utiliza como introducción del argumento central: "Era
alguien de extraordinaria virtud".
Recibió los honores
apropiados tras su muerte: gloria y un entierro honorable. Obtuvo total
crédito por sus acciones.
Si
Sansón mató a tres mil personas porque sus enemigos lo encadenaron e
insultaron, ¿por
qué los palestinos no habrían de intentar lo mismo por las mismas
razones? Si Sansón
se convirtió en un héroe nacional y un símbolo religioso por su ira
ilimitada, ¿por qué
algunos palestinos no habrían de intentar alcanzar semejantes honores
entre su propia gente?
La
operación de martirio de Sansón de hace tres mil años se convirtió
enseguida, y así permanece hasta hoy, en un mito legendario para los
judíos. Con el peso y la fuerza que portan en su herencia cultural y su
psique, es difícil pensar que los judíos de hoy día se puedan
sorprender cuando otros (los
palestinos) siguen la senda de Sansón.
No había nada especial en la ira de Sansón, que es una pasión humana
universal. Uno no
tiene por qué ser judío para sentirla ardiendo en el espíritu.
Si
todos los seres humanos son iguales, pero los derechos humanos no son
universales, entonces es natural que la violencia prevalezca. Uno no
puede mas que darse cuenta de que continuar con las violaciones de
derechos humanos a gran escala,
generación tras generación,
sólo resultará en que más y más Sansones se alzarán en su terrible furia.
¿Veis
ahora por qué Sansón ha vuelto a Gaza?
Ulises Benito |