Aulo Vitelio fue emperador romano después de Otón y antes de
Vespasiano. La pupila de su ojo derecho estaba deformada y algo salida de
su órbita. Duró menos de un año en el trono de Roma y sin embargo se lo
considera como el peor, el más cruel, déspota y vicioso de todos los
emperadores romanos de la historia. Realmente un perverso y un mal
nacido hecho y derecho.
Había
nacido en el 12 d.c. y cuando tenía 57 años era emperador (año 69 d.c.).
Fue muerto ese mismo año por el pueblo que lo linchó y lo colgó de una
columna boca abajo.
Sin
embargo, Vitelio tuvo una faceta que, no por sangrienta, era menos
destacada: Fue el mayor recaudador de impuestos de toda la
historia de Roma.
Dejó las arcas con tanto superávit ("fiscal") que Vespasiano
(su sucesor), además de sus brillantes condiciones personales (reconocidas
por la historia) tuvo mucha ayuda al iniciar su obra.
Pero veamos lo que hacía Vitelio para hacerles tributar impuestos a todos
los ciudadanos y poder así gastar en sus formidables vicios pero lograr,
que aún de ese modo, sobrara el dinero a raudales:
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Todos
sin excepción, debían tributar incluyendo niños y ancianos. Pese a que
cinco de cada diez niños no llegaban a cumplir los 4 años de vida, un
recién nacido debía tributar. Sus padres eran los responsables de tal
obligación y si la madre era soltera debía buscar sustento en la
prostitución para hacerlo.
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No
había necesidad de facturación, ni de blanqueo de empleados, ni de
cualquier otro tipo de registración.
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Sólo
por ser ciudadano romano, sólo por existir, se debía tributar (la otra
opción era huir) una suma que era igual para los ricos y los pobres, con
la única diferencia de las tres categorías de edad (en Roma se era niño,
se era joven ó se era anciano).
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Los
ancianos, aún los inválidos y sin trabajo debían tributar también, para lo
cual se apuraban a pedir limosna día y noche.
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Al que
no pagaba impuestos Vitelio lo encarcelaba y lo hacía torturar durante una
semana entera, en forma horrenda.
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Mercancías que salían ó entraban a Roma eran confiscadas en una tercera
parte para ser destinadas al pago del tributo.
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El
superávit fiscal "a cualquier precio" era pues, para Aulo Vitelio igual
que la opinión pública impulsada con soborno y amenazas como forzosamente
laudatoria y a su favor.
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Así
creció la economía artificialmente en un lapso tan breve que parecía
increíble la magnitud de la recaudación hallada al fin de la "gestión" a
través de la liturgia de las exacciónes impositivas totalitarias y
compulsivas.
Tomemos entonces ese nítido ejemplo fotográfico de la historia antigua.
La fórmula del cóctel parece clara:
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Poderes plenos y totalitarismo déspota,
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Compulsión, aprietes,
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Prensa
hipotecada ó sojuzgada,
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Régimen impositivo salvaje,
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Suma
del poder público, tener 57 años de edad y un ojo siniestro,
Son
suficientes para tener una economía en crecimiento, aunque sea navegando
en un mar de artificialidad y aunque todo termine con el tirano colgado de
un farol de la calle, apedreado por un pueblo completamente harto.
Pero por estas comarcas no hay cuidado de que ese cóctel histórico se
repita ó se produzca por cuanto :
1) No hay un totalitario en el poder.
2) No tiene poderes plenos, ni los implementa para ninguno de sus
ministros.
3) Si los tuvo, seguro que no querrá prorrogarlos nunca más.
4) No se encuentra vigente un régimen impositivo salvaje.
5) No existen los aprietes a nadie por ninguna causa.
6) No existe demagogia ni deseos de perpetuación.
7) La opinión pública no está hipotecada ni sojuzgada desde el poder.
8) Nadie pretende la suma del poder público.
9) No hay un emperador que tenga exactamente 57 años de edad y un ojo
siniestro.
10) A nadie se le cruzaría por la cabeza querer colgarlo de un farol.
La comarca puede pues, estar tranquila y ningún peligro se halla en
ciernes....Además, si tuviésemos la mala suerte de tropezar con un
escenario semejante, entonces seguro que después habría de
llegar un "Vespasiano" que le habrá de regalar a esta comarca, sus años de
oro y su esperada época de gloria.
Salud y Esperanza,
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